Seguimos estando donde estamos...
Yo no sé si son los años que tengo encima o mi desesperada búsqueda de la perfección, entendida esta, como la simple forma de que las cosas se hagan bien.
Yo no sé si son los años que tengo encima o mi desesperada búsqueda de la perfección, entendida esta, como la simple forma de que las cosas se hagan bien.
Analizando restrospectivamente, puedo deducir que, parte de la culpa (y por mucho) es de nosotros mismos.
Somos el resultado de la época de mayor evolución de la humanidad, con logros importantes en tecnología, robótica, informática, medicina, farmacología, espacio-universo, comunicaciones, etc, pero con estos logros, nada despreciables olvidamos algo, si carajo, lo olvidamos; se nos olvidó no enfatizar en la humildad que debe reinar entre los hombres, olvidamos: que mis derechos comienzan donde los tuyos terminan; olvidamos: que para recibir hay que dar primero; olvidamos: que el amor nace de la necesidad espiritual de las almas; olvidamos VERGATION OLVIDAMOS!!!
Es increíble observar, hasta en lugares remotos como Macanao en la bella Isla de Margarita, en Santa Rita en el respetado Zulia o en el páramo de Mucuchies de mi preciosa Merida, a "pseudo" humanos que desentrañan valores tan bajos como el precio de la gasolina en este país.
Expresiones como: "dejalo ahí", "echalo por la ventana", "cual es el stress con ese potecito de plástico en el río", "así es... pá que sea serio"; reflejan lo bajo en conocimiento, valores y ética social que cualquier mortal debiera tener.
Entonces me pregunto: ¿Para que "carajos" nos jactamos de Títulos, Post Grados, Maestrías y hasta Doctorados?, si nos cuesta tanto gesticular un "por favor", "gracias", "hasta luego", "buenos días", "señor", "señora", "señorita", "joven", "permitame"; simples frases pero con un contenido lleno de sabiduría, inteligencia y por qué no, impecable decencia.
Hemos perdido el norte, nos jactamos de tanta inteligencia que rayamos en lo "chabacano", "ordinario", "vulgar" y "grotesco" de nuestras acciones, las cuales con palabras arrollamos cualquier ápice de sabiduría que pudiésemos tener.
Es triste ver jóvenes irrespetar a sus padres; me avergüenza ver padres pisoteando y humillando a niños inocentes; pero me aterra tener que llegar a lo que será mi tercera edad, soportando el llanto inconsolable de un hijo que reclama un maltrato que pudo ser evitado y que por puros hechos del destino, trata de esquivar para no ser transmitidos a su propia prole.
Es curioso que entre tanto conocimiento la IGNORANCIA de los mas obvio, nos arrope el CONOCIMIENTO y empuje hacia un fracaso como seres humanos; padres; hijos; amigos; en fin CIUDADANOS.
Vergation, Mollejation...
Hemos perdido el norte, nos jactamos de tanta inteligencia que rayamos en lo "chabacano", "ordinario", "vulgar" y "grotesco" de nuestras acciones, las cuales con palabras arrollamos cualquier ápice de sabiduría que pudiésemos tener.
Es triste ver jóvenes irrespetar a sus padres; me avergüenza ver padres pisoteando y humillando a niños inocentes; pero me aterra tener que llegar a lo que será mi tercera edad, soportando el llanto inconsolable de un hijo que reclama un maltrato que pudo ser evitado y que por puros hechos del destino, trata de esquivar para no ser transmitidos a su propia prole.
Es curioso que entre tanto conocimiento la IGNORANCIA de los mas obvio, nos arrope el CONOCIMIENTO y empuje hacia un fracaso como seres humanos; padres; hijos; amigos; en fin CIUDADANOS.
Vergation, Mollejation...